Rueda de Prensa presentación ILP en Burgos y Movilizaciones por la visita del Ministro de Justicia


28 abr 2015



Si nada ni nadie lo remedia, los registradores de la propiedad podrían comenzar a encargarse del Registro Civil a partir del 15 de julio. El Congreso de los Diputados tramita en estos momentos la ley por la que se ejecutará la reforma de este servicio público, un paso adelante en el “desmantelamiento” de la Administración de Justicia, en opinión de Comisiones Obreras. Defendido por el Gobierno Central como un mecanismo para mejorar el funcionamiento del Registro Civil, el traspaso de competencias supone para el sindicato una “privatización”, que alejará el servicio de los ciudadanos y acabará con su gratuidad.
El traspaso “menoscaba la labor de los funcionarios en favor de los ingresos de una empresa”
Javier Sanz, coordinador regional del Sector Justicia de CC.OO en Castilla y León, ha recordado que el Registro Civil es un servicio básico para el ciudadano de a pie, que tramita anualmente más de 1,4 millones de documentos, desde una partida de defunción a un certificado de nacimiento para un DNI. Por ese motivo, el Registro es un servicio de cercanía y Burgos cuenta con 371 oficinas repartidas por la provincia. Sin embargo, cuando entren en juego los registradores, esas oficinas desaparecerán y serán sustituidas por un único espacio de tramitación en la capital. Adiós a la inmediatez, ha insistido Sanz.

Ni gratuidad ni confidencialidad

Además, desde Comisiones Obreras aseguran que el Registro Civil dejará de ser gratuito, ya que las negociaciones que mantiene el actual ministro de Justicia con los registradores incluyen la posibilidad de cobrar “aranceles” (una especie de tasa) por algunos trámites, como los expedientes de nacionalidad o los de matrimonio, al mismo tiempo que se crearán nuevos trámites registrales obligatorios y de pago, como el de domicilio. Es por ello que Sanz considera que el Registro Civil se convertirá en un negocio para una empresa, que eso es lo que son los registradores, dejando de ser un servicio público.
Y es que, por mucho que diga el Gobierno Central que los registradores son funcionarios, son autónomos. Y, lo que es peor, si no son funcionarios no pueden dar fe pública, función clave en el Registro Civil, ni están sometidos a un principio de confidencialidad. De ahí que el sindicato tema que los datos privados de los ciudadanos vayan a acabar en manos de los equipos de los registradores, sin control alguno. Se está “menoscabando la labor del funcionario, en favor de los ingresos de una empresa”, han insistido en CC.OO, recordando que tras el boom inmobiliario, los registradores de la propiedad viven horas bajas.

ILP

Faltan medios, recursos económicos y plantilla, así como modernizar el servicio, pero funciona
Por todo ello, Comisiones Obreras ha iniciado una campaña de recogida de firmas para impulsar una Iniciativa Legislativa Popular (ILP), con la que presionar al Gobierno Central para que paralice el proyecto. En la propia sede del sindicato, pero también en los registros civiles o dependencias de administraciones públicas, el ciudadano interesado en colaborar encontrará los formularios para estampar su firma. También sacarán mesas a la calle. Requieren de 500.000 apoyos para que, al menos, la ILP se debata en el Congreso de los Diputados.
Javier Sanz ha insistido en que no existe ningún motivo para eliminar el Registro Civil tal y como lo conocemos. Cuando se alega falta de eficiencia se olvidan de comentar que lo que faltan son recursos, humanos y económicos, y modernización del servicio.  Lo único que se ha hecho en los últimos años ha sido apostar por la digitalización de documentos, con una inversión de 130 millones de euros, de la que ahora se van a beneficiar sin coste alguno los registradores. Además, se están paralizando tramitaciones, como las de los expedientes de nacionalidad, para intentar justificar la medida.


REUNIÓN DE LA JUNTA DE PERSONAL CON EL DIRECTOR GENERAL Y PITADA AL  MINISTRO DE JUSTICIA EN SU VISITA A BURGOS

El pasado 21 de abril los miembros de la Junta de Personal tuvimos una reunión con el Director General de Relaciones. Informo que su idea es digitalizar todos los expedientes, aunque únicamente se había llevado a cabo en la Audiencia Nacional, -nos consta que con malos resultados-.

Pasó de puntillas en el tema del Registro Civil, remitiéndonos continuamente a la reunión con los sindicatos en Madrid el día 27 y que estaban dispuestos a dialogar y a aceptar propuestas razonables, ya que según él lo único que hacen es cumplir la Ley, aprobada unánimemente por el Parlamento, que acordaba sacar el Registro Civil fuera de la Justicia.

Respecto a la NOJ en Burgos, manifestó que las 23 plazas de refuerzo se van a seguir manteniendo, al menos mientras él siga siendo director general y que iba a hacer lo posible que esos 23 refuerzos se consolidasen como plazas vacantes, aunque en este último concurso no saldría, ya que Hacienda no había dado todavía el visto bueno.

Manifestó asimismo que el concurso de traslados se estaba retrasando a propósito por la ubicación de los funcionarios del Registro Civil.

Respecto al Proyecto de reforma de la Ley Orgánica, hizo mención al preacuerdo que firmaron con  los sindicatos UGT, CSIF y STAJ, no manifestando nada mas al respecto.

Por último se habló de los problemas del sistema informático y sobre el tema de las comisiones de servicio, proponiéndole que se regulen y se establezcan como en ciertas Comunidades Autónomas, donde sí están reguladas y no como en el Ministerio donde se conceden de forma discrecional. Únicamente dijo que se iban a tener en cuenta las causas humanitarias para concederlas y que ellos no podían dar comisiones en territorios donde existen muchos interinos y dejar éstos vacíos de titulares.

A las 11,30, más de un centenar de funcionarios y ciudadanos nos concentramos frente al Palacio de Justicia recibiendo al Ministro con una sonora pitada y al grito de “El Registro civil no se vende, se defiende”.
           
Maxi Niño Encinas – Coordinador Provincial de CCOO de Justicia

Protestas contra la reforma del Registro Civil en la visita de Catalá a Burgos

Los Trabajadores de la Administración de Justicia de Burgos han aprovechado hoy la visita a Burgos del ministro de Justicia, Rafael Catalá, para protestar por la reforma de Registro Civil, que a su juicio supone una suerte de privatización encubierta de un servicio que debiera ser “público” y “gratuito”. Al filo del mediodía, los manifestantes se han concentrado frente a las puertas del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla y León, donde Catalá tenía previsto imponer las condecoraciones de la Orden de San Raimundo de Peñafort, aunque la Policía les ha ubicado finalmente en la acera contraria.

Con todo, y a pesar de la separación entre ambos puntos, Catalá, que se ha trasladado a pie desde el Fórum Evolución, ha sido recibido con pitos y silbidos por parte de los manifestantes, que insisten en la necesidad de mantener la estructura del Registro Civil tal y como está establecida ahora mismo.

Esta no es si no una más de las protestas efectuadas en los últimos meses a respecto de la reforma planteada por el Gobierno, que vista la situación tiene todos los visos de aprobarse de manera efectiva en las próximas semanas. En este sentido, el sindicato Comisiones Obreras acaba de iniciar una campaña de recogida de firmas destinada a plantear una Iniciativa Legislativa Popular mediante la que solicitará la paralización de la reforma.




Imprimir artículo